A la hora de reformar una vivienda siempre prestamos atención a los aspectos más importantes. Una nueva distribución, la reforma del baño o de la cocina etc. Dentro de todo este ámbito, muy pocas personas tienen en cuenta a las puertas. Un aspecto que tiene más repercusión de lo que uno cree, ya que son las encargadas de dar continuidad a la decoración. Si no te habías cerciorado de este aspecto, te damos una serie de consejos sobre cómo elegir las puertas de interior.
Si las puertas no respetan el estilo que queremos impregnar en nuestro hogar, el resultado será un poco extraño y puede que nos arrepintamos de la decisión.
Más allá de seguir con nuestro gusto o intenciones la figura de un profesional que nos aconseje a la hora de cambiar las puertas siempre es recomendable. Qué tipo de material, elegir un acabado, qué tipo de puerta… son algunas de las cuestiones que uno debe plantearse antes de acometer esta labor.
Muchos clientes nos preguntan cuál es el mejor material para puertas de interior, y realmente no hay una respuesta. En el mercado existen diferentes materiales que dependiendo de nuestro gusto, y el estilo que queramos dar, nos decantaremos por uno o por otro. Existen puertas de madera, PVC, de cristal, tableros DM etc. Un amplio abanico de posibilidades que deberemos analizar con detalle. Seguido de este aspecto también debemos pensar en el tipo de puerta. Existen diferentes aberturas que darán más luminosidad o espacio a una estancia.
Tipos de apertura puertas de interior
Aunque parezca un aspecto poco importante, elegir bien un tipo de apertura nos permitirá ganar metros y favorecer la transición entre las diferentes estancias. Según las intenciones que tengamos, será mejor decantarse por una o por otra.
Puertas abatibles
Las más habituales en las viviendas, las clásicas de bajar el picaporte y empujar para entrar a la estancia. Pueden ser opacas, con un pequeño cristal que dé luminosidad etc. La gama de posibilidades es muy amplia y el presupuesto dependerá mayoritariamente de esta característica.
Puertas correderas
Para lugares pequeños o donde no queremos perder espacio, existen las puertas correderas, ya sean vistas u ocultas. Las ocultas se meten en el tabique y no se ven, mientas que las vistas darán un aspecto más rústico. Se calcula que se gana entre 1 y 1,5 metros cuadrados si nos decantamos por esta opción.
Puertas plegables
La opción más económica y se usan cuando no hay sitio para abrir una hoja ni para guardar la corredera. Su apertura y cierre es de tipo fuelle y el material más empleado suele ser de plástico.
Por último también encontramos las puertas pivotantes, pero no son muy empleadas ya que se necesita mucho espacio. A la hora de abrirse giran sobre un eje, son muy espectaculares por lo que se suelen usar como puertas de acceso, aportando un aspecto diferenciador.
Medidas puertas estándar
Por suerte a la hora de elegir puerta para el interior de nuestro hogar, hay una serie de medidas estándar, adecuándose a cada tipo de vivienda. Por supuesto que puedes contratar un carpintero y que diseñe una con las medidas que quieras, pero el presupuesto destinado a ello se incrementará.
Existen una serie de tamaños que se amoldan a cualquier tipo de espacio. En el caso de las puertas abatibles y correderas, las medidas habituales van desde los 62,5cm a los 82,5cm, dependiendo si queremos que sea una estancia adaptada para personas con movilidad reducida. La altura habitual de una puerta de interior es 2,03m.
Elegir una puerta de interior para nuestro hogar, no es solamente fijarse en el color y si nos gusta o no. Se deben tener en cuenta diferentes aspectos decorativos y las necesidades que tengan los que residen en la vivienda. Por eso recibir un buen asesoramiento por parte de un profesional es aconsejable, y optar por una puerta que junte decoración y funcionalidad a partes iguales.
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