Se acerca el buen tiempo, sinónimo de vacaciones y pasar más tiempo fuera de casa. Por desgracia esta época también es empleada por los amigos de lo ajeno para entrar en cualquier vivienda aprovechándose de nuestra ausencia. Para cerciorarse de ella, los ladrones establecen una serie de señales para asegurarse de que está vacía. Hoy explicamos las marcas que hacen los delincuentes en las casas para que seáis conscientes de los mecanismos que utilizan.
Policía Nacional y Guardia Civil alertan todos los años de este tipo de prácticas y ahora que ya queda poco para las vacaciones estivales es buen momento para recordarlo.
De todas formas podemos evitar cualquier allanamiento si contamos con una buena cerradura que evite técnicas como el bumping, impresionig, magic key etc. Cualquier cerrajero podrá asesorarte sobre los diferentes modelos existentes en el mercado y cuáles son los más seguros ante las diferentes técnicas.
Para un ladrón, que va a asaltar una casa, que no haya gente es lo mejor. Un inmueble vacío es sinónimo de no tener testigos, poder estar tiempo dentro etc. Para ello establecen una serie de técnicas con el fin de asegurarse de ello. Podemos denominarlo «pequeños trucos” o señas con las que certifican que no hay nadie en casa.
¿Cómo marcan la puerta los ladrones?
El primer mecanismo es el empleo de hilos de pegamento. Los cacos unen la puerta y el marco mediante este material, de tal forma que si abrimos o cerramos la puerta, el hilo se rompe, alertando al ladrón de la presencia de gente. Es un recurso bastante empleado ya que pasa prácticamente inadvertido. Generalmente estos hilos suelen ubicarse en la parte baja de la puerta.
Otra herramienta que utilizan los amigos de la ajeno es el papel film o celofán. El mecanismo es el mismo que hemos explicado anteriormente. Unen marco y puerta y así comprueban fácilmente si en la vivienda hay movimiento.
Seguimos con los “trucos” para comprobar si hay movimiento en el domicilio. Instalan pequeñas piezas de plástico que colocan en la puerta. Si pasado un tiempo y esos trozos no se han caído, significa que no hay gente en la vivienda. Este mismo truco sucedería con otro tipo de materiales como el papel, cartón etc.
Por último, en otras ocasiones utilizan otras partes de la puerta para detectar la presencia de los habitantes. Por ejemplo, los delincuentes suelen romper la mirilla. Si no se arregla, es una señal de que pueden entrar, ya que no hay nadie en casa.
Del mismo modo también usan la cerradura como chivato de cuándo hay gente en casa. Meten pequeñas bolas de papel en ella, y así, saben que la vivienda está vacía en el momento del robo.
Estas son algunas de las marcas que hacen los ladrones en las casas para averiguar si están vacías. De todas formas, si queremos evitar este tipo de circunstancias, un buen cerramiento será la mejor barrera para que los ladrones no entren en nuestro hogar. Para ello lo mejor es recibir el asesoramiento de profesionales que nos expliquen los últimos modelos del mercado para cambiar nuestra vieja cerradura por otra más moderna y segura.
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