La clave para que un suelo sea duradero y conserve todas sus propiedades vas más allá de un acabado sobresaliente que aguante el paso del tiempo. También hay que prestar atención a lo que hay bajo él. Una buena capa aislante debajo del suelo laminado alargará su vida útil, además de brindar el aislamiento adecuado tanto térmica como acústicamente.
Las propiedades de esta capa aislante vienen determinadas por su densidad y grosor, aspectos importantes para la durabilidad de este tipo de pavimento.
Por eso, si hemos decidido cambiar el suelo de nuestra vivienda, no solo tendremos que prestar atención a la calidad de los materiales y el acabado, también hay que tener en cuenta lo que no se ve que es igual de importante.
Para aquellos que desconozcan que se pone debajo del suelo laminado, normalmente se instala una lámina aislante que viene en rollos y se coloca entre el suelo viejo y el laminado. La misión de este producto es ofrecer el aislamiento suficiente y alargar la vida útil de la parte visible. De hecho, algunos suelos laminados ya llevan incorporado esta base ahorrando tiempo y haciendo que la instalación sea más sencilla.
Mejor base aislante para suelo laminado
Si hemos decidido hacer esta labor nosotros mismos y renunciar a profesionales, hay que decir que en el mercado existen diferentes bases. Lo más conveniente es decantarse por una de calidad y con el grosor adecuado que además de proporcionar el aislamiento suficiente, también nos permita nivelar las pequeñas irregularidades existentes.
- Base aislante de polietileno. El material más empleado. Es una capa de fibra que incorpora una lámina de polietileno. Suele presentar un grosor de 2 o 3mm y según el nivelado de la solera puede ser con retícula abierta o cerrada. Este último mucho más grueso.
- Base de látex. Con un grosor de unos 2 o 3 mm, brinda un gran aislamiento acústico.
- Base de corcho. Para los que estén concienciados con el medio ambiente, se trata de un material ecológico con grandes prestaciones. Su mayor inconveniente es su elevado precio comparado con el resto.
- Base de goma eva. Material impermeable por lo que su colocación es recomendable en lugares húmedos. Está disponible en diferentes espesores.
En resumen, a pesar de que es una superficie que no vamos a ver, elegir de forma adecuada la base que instalarás debajo del suelo laminado es importante. Gracias a ella, la “cara visible” tendrá una mayor vida útil, además de garantizar su durabilidad y resistencia, sin olvidar que aportará aislamiento acústico y térmico. Más allá de decantarnos por un suelo laminado que sea tendencia o sea afín a nuestra personalidad, el grosor, la densidad y el tipo de material de la capa aislante también hay que tenerlo muy en cuenta.
Si quieres saber más acerca de que se debe poner debajo de un suelo laminado, lo mejor es que te pongas en contacto con profesionales. Ellos resolverán tus dudas y te asesorarán sobre qué tipo de material es el más indicado, según las características de tu vivienda.
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