Pintar encima de la madera es una forma ideal de dar un aspecto más moderno y/o rejuvenecedor a muebles, puertas, sillas etc. Con esta simple tarea nuestro mobiliario parecerá como nuevo, gastando muy poco dinero. Ahora bien, este material es bastante sensible por lo que si hemos decidido darle un aire nuevo y prescindir de un pintor profesional, te explicamos el tipo de pintura que se debe utilizar para pintar madera.
Si nos decantamos por una pintura poco adecuada, no obtendremos un buen resultado ya que comenzara a descascarillarse en un breve periodo de tiempo.
Son varios los aspectos que se deben tener en cuenta para emplear la pintura correcta si hemos decidido pintar nosotros mismos. Por ejemplo, cabe recordar que la madera es un material poroso y que necesita respirar para conservar sus propiedades. Además también hay que analizar el uso que le damos a ese mobiliario y si va a estar en el exterior o en el interior de nuestro domicilio. Si es una mesa de exterior, se debe optar por una pintura más dura y que sea resistente a las condiciones meteorológicas; sol, lluvia etc.
¿Cuál es la mejor pintura para madera?
Valorados estos aspectos, llega el momento de establecer cuáles son los mejores tipos de pintura para la madera.
Pintura acrílica
La pintura acrílica es la opción más versátil y la más demandada. Sus características más destacadas son: secado rápido, se adhiere bien a la madera y la podemos encontrar en gran cantidad de colores. Es idónea para proyectos pequeños y decorativos, pero no es recomendable para mobiliario de uso habitual.
Pintura de látex
Al igual que la acrílica, dada su facilidad uso y limpieza, es muy demandada por los particulares. Brinda unas excelentes propiedades adherentes y es resistente a la decoloración. Su uso es recomendable tanto es exteriores como en interiores. Eso sí, dependiendo del tipo de madera a pintar puede que necesite de una imprimación previa.
Pintura base
Esta pintura en sí sería como un paso previo a la pintura que realmente queremos emplear. Suele usarse en trabajos de restauración completa y como paso previo al color final. De fácil uso, su principal ventaja es su capacidad de adherencia para obtener resultados profesionales y duraderos.
Barniz
Por último a pesar de que no se puede considerar como un tipo de pintura, si solo queremos resaltar sus propiedades y brillo, el barniz será más que suficiente. Podemos optar por diferentes acabados (mate, brillante etc.) y es la mejor elección para mantener el tono natural de la madera.
Aunque la madera es un material resistente, el paso del tiempo y una falta de labores de mantenimiento hacen que pierdan sus propiedades. Por eso, tanto si queremos darle un aire nuevo como recuperar sus características, con este tipo de pinturas lo conseguiremos. De todas formas si buscas un resultado profesional, lo mejor es confiar en pintores con experiencia. Ellos solventarán nuestras dudas y se encargarán de darle un aire nuevo y renovado a cualquier tipo de mobiliario.
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