Adoptar medidas para evitar la pérdida de calor de tus ventanas, no sólo redundará en un mayor confort para tí, sino que contribuirás a la reducción de emisiones de CO2.
En este post explicaremos qué es el puente térmico y cómo se realiza la fabricación de ventanas de aluminio con rotura de puente térmico.
El puente térmico
Se denomina puente térmico a la zona que deja escapar mayor cantidad de calor respecto de otras, debido a la conductividad de materiales, al espesor, o a cuestiones geométricas. Cuando hablamos de ventanas de aluminio con cristal aislante, la conductividad del marco de aluminio es mayor que la del cristal aislante (doble o triple cristal), y en principio el marco o perfil de aluminio será el puente térmico ya que es la parte de la ventana que mayor cantidad de calor dejará escapar.
Fabricación de ventanas de puente térmico
Pera evitar la pérdida de calor a través de las ventanas, hay que conseguir un buen aislamiento del exterior tanto mediante un cristal aislante, como de un perfil o marco de ventana con rotura de puente térmico (RPT). El cristal aislante o doble cristal consigue un buen aislamiento dejando una cámara de aire entre los dos cristales, ya que el aire no es un buen conductor.
Cuando hablamos de ventanas de aluminio, para evitar la transmisión del calor del interior de la vivienda al exterior, las carpinterías de aluminio consiguen la rotura del puente térmico separando la parte exterior de la interior con un mal conductor. El perfil cuenta con dos partes diferenciadas, la interna y la externa, que se separan por un mal conductor que habitualmente es una varilla de poliamida. Esta forma de fabricar las ventanas de aluminio, permite a su vez mostrar un acabado de la ventana diferente en el interior y el exterior de la vivienda (por ejemplo blancas en el interior, e imitación madera en el exterior).
Tanto gracias al perfil de aluminio con rotura de puente térmico, como al cristal aislante, se consigue aislar la vivienda reduciendo la pérdida de calor. Además supone un ahorro energético importante, ya que las necesidades de calefacción serán menores. Gracias a esa reducción en el consumo, también reducimos las emisiones de CO2 al medio ambiente. Por último, como el perfil interior no se enfría tanto, se consigue evitar la condensación de humedades junto al marco de la ventana que se producen cuando la temperatura del perfil es muy baja y la humedad del interior muy alta.
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